El Servicio de Administración Tributaria (SAT) negó rotundamente el hecho que con la llegada de la factura instantánea el siguiente año se exista una mayor fiscalización sobre los contribuyentes.
“No es una medida con la que se busque fiscalizar, sólo es una herramienta de facilitación que el SAT pone a disposición de los contribuyentes para que puedan obtener su factura más fácil y rápidamente, al momento de pagar con su tarjeta bancaria en una terminal punto de venta (TPV)” respondió el órgano recaudador.